lunes, 12 de mayo de 2008

Mi amado bosque




A ti que me hablas entre susurros

A ti que me das cobijo bajo los rayos del sol

A ti que me arrullas con tus hojas cuando llega el otoño

A ti que alimentas mis pulmones

A ti que no me pides nada

A ti que me dejas plasmarte en óleos

A ti tonos verdes,marrones,amarillos

A ti que me sabes escuchar

A ti por que sí

2 comentarios:

Anónimo dijo...

En Ocasiobes tengo el alma oscura, dolida, herida de muerte y, es en esos momentos, cuando me refugio cual Robin Hood en el bosque, en la montaña.

La naturaleza nos da todo lo que tiene para que disfrutemos de ella, hagamoslo.

Amapola dijo...

El problema es que valoramos lo que tenemos cuando lo perdemos.......
Besos d.j.r.v.